Antecedentes
La Cocina de Jader, es un restaurante especializado en comida de mar, ubicado detrás de la Iglesia de Manrique, cuenta con tres empleados. Este emprendimiento nació en el 2016, época en la cual, su fundador regresó de Lima, Perú tras haberse graduado de la Universidad Gastronómica Internacional Francesa “Le Cordon Blue” donde afianzó sus conocimientos gastronómicos.
Después de realizar un sondeo, de los restaurantes que ofrecían en su menú comida de mariscos, identificó que en el barrio Manrique carecía de esta oferta gastronómica.
Descripción del problema
Jader Luís Mercado, propietario y fundador de La Cocina de Jader antes de ingresar al programa Desarrollo de Proveedores pensaba que “se las sabía todas” en este negocio y que no necesitaba ayuda. Cuando le comentaron acerca de este programa, por medio de una vecina que ya estaba en el acompañamiento, se dio cuenta que podía ser de gran utilidad las herramientas que desde el programa le brindaban para poder mejorar su negocio.
En el trabajo con el especialista Javier Velásquez, identificaron ciertas irregularidades como los faltantes en el flujo de caja, que no tenían estandarización en los procesos y en las recetas, además se identificó la necesidad de mejorar el flujo de los procesos.
Acciones implementadas
Cuando iniciaron el acompañamiento con el CTA, comenzaron a implementar la estandarización de los precios, 5´s, redistribuyeron los implementos de la cocina con el objetivo de mejorar el flujo de procesos y disminuir los tiempos de preparación de los alimentos.
Resultados obtenidos
Tras las acciones implementadas, se lograron unos muy buenos resultados como, la estandarización de todas sus recetas, se creó un protocolo de aseo facilitando que los colaboradores identifiquen qué procedimiento se debe implementar a la hora de realizar la limpieza.
Sumado a esto, el tiempo de preparación y entrega de alimentos pasó de 14 a 9 minutos, generando así una mejora tanto en la productividad como en la atención al cliente, algo que Jader reconoce y se siente orgulloso es que sus comensales han notado desde cosas mínimas como la mejora del servicio, permitiendo así crear una experiencia única no solo desde la buena atención sino también desde la calidad de sus platos creando así, una experiencia única para el paladar.
Proyecciones
La pasión que Jader impregna a sus preparaciones, lo ha motivado a querer expandir su negocio y verlo en un futuro como una cadena de restaurantes que le permita a la ciudad de Medellín deleitarse con el sabor de sus alimentos.