*El presente artículo se basa en las reflexiones compartidas por el especialista en productividad, Germán Madroñero, el pasado 16 de abril en el webinar titulado “La crisis, una oportunidad para reinventarse”.
La coyuntura actual desatada por la pandemia del COVID-19 nos hace hablar de crisis, una palabra temida, pues trae consigo situaciones adversas para la mayoría de las personas. Sin embargo, hoy queremos hablar de este tema desde una perspectiva positiva, algo que los grandes empresarios a nivel mundial han logrado desarrollar para sacar de allí el mayor provecho posible.
Incluso Albert Einstein llegó a reflexionar sobre el tema, indicando que las crisis no solo son importantes, sino también necesarias para el avance de la humanidad, pues solo allí es cuando surgen las grandes mentes.
El anterior concepto fue algo que la cultura china tuvo claro desde el comienzo de los tiempos. En mandarín, la palabra “crisis” se escribe con dos caracteres: 危 y 机, que juntos se pronuncian “weichi”. 危 (wei) significa “peligro” o “riesgo”, mientras que 机 (chi) se puede interpretar como “oportunidad”. Esto nos indica que, incluso en las situaciones de mayor amenaza hay una oportunidad, y de eso se trata el presente artículo, de ver cómo podemos sacar lo mejor en tiempos de crisis.
Para lograr este propósito proponemos abordar los siguientes aspectos:
- Elimina el miedo y entra en acción
Sentir miedo es inevitable. Lo que debes hacer es recordar que es solo una emoción, algo que existe en nuestro pensamiento y nos paraliza. Sin embargo, el peligro es real, y por tanto debemos tomar acción y movilizarnos.
Para alcanzar esta meta debes identificar qué es lo que está causando esa sensación de temor, debes darle un nombre y eliminar las fuentes que te están llevando a la parálisis del miedo.
Una vez hayas cumplido con este objetivo, puedes proceder al siguiente paso.
- Cómo manejar la emergencia actual
Tu cabeza ahora se encuentra fría. Es momento de sacar provecho de la crisis.
- Promociónate: saca a relucir qué puedes hacer, cómo puedes ayudar, qué soluciones puedes ofrecer. Siembra la semilla de lo que quieres alcanzar.
- Renuévate: ya no estás en la oficina, por lo que debes identificar los horarios en lo que puedes ser más productivo (a). Esos espacios pueden estar, incluso, en la madrugada o por la noche, de acuerdo con tu condición familiar.
- Economiza: debes medir tus gastos y establecer qué es posible reducir o suspender.
- Prepárate para entregar un excelente servicio: ahora es cuando el servicio se hace indispensable. Llama a tus clientes, pregúntales cómo están, identifica en qué puedes ayudarles, cómo puedes vincularte con ellos. Se sentirán bien acompañados y podrás atender sus necesidades.
- Endurece la disciplina: si te encuentras trabajando en casa, realiza una agenda que te permita hacer seguimiento de las actividades pactadas con tu equipo de trabajo y los líderes que pueden ayudarte en el control. En el caso tal de que no estés produciendo, es momento de hacerlo. Crea, innova, mira tendencias, actualízate, concreta horarios y tareas que puedas realizar.
Sumado a lo anterior, en el momento que estamos viviendo, el trabajo en casa es fundamental para lograr mantener la productividad. En ocasiones, relacionamos nuestro hogar con un espacio de descanso, lo que ocasiona que, por momentos, baje nuestro ritmo de trabajo o que incluso se nos llegue a dificultar ser efectivos con nuestras responsabilidades.
Con el objetivo de evitar lo anterior, preparamos una serie de tips que harán de tu trabajo en casa un espacio más productivo:
- Identifica qué tipo de colaboradores tienes:
- Productivos: no requieren supervisión.
- Intermedios: son productivos, pero requieren supervisión y una ruta de trabajo.
- Bajos: su actividad no se puede ejecutar desde casa o requieren supervisión permanente.
Asigna tareas y responsabilidades de acuerdo con estas características para evitar que se queden labores por hacer y cumplir así todos los objetivos presupuestados.
- Realiza seguimiento:
Programa reuniones donde puedas revisar las tareas que se asignan. El qué, cómo y cuándo deben tener un seguimiento claro para identificar su efectividad. Utiliza herramientas que puedan ayudarte a tener toda la información actualizada.
- Documenta el Know How de tu empresa:
Identifica ese conjunto de experiencias que han llevado a tu compañía al éxito. En caso de que no lo tengas, es momento de crearlo.
- Capacita a tus colaboradores:
Esta es la oportunidad perfecta para entrenar a tu equipo. Actualízalos y desarrolla cursos que puedan aportar a la solución de los inconvenientes que plantea la crisis actual.