El agua y las coberturas vegetales están estrechamente acopladas. Dicha relación establece un control sobre el movimiento del agua en las cuencas de drenaje, los acuíferos y por tanto los caudales de las redes hídrica. Sin duda la cobertura vegetal boscosa, participa en la regulación del ciclo hidrológico. Más aún, las plantas actúan como la principal ruta de retorno de agua terrestre a la atmósfera y mediante la interceptación de agua en el dosel (porción de agua retenida por el follaje) que determina la cantidad de agua que llega al suelo.
El Área Metropolitana del Valle de Aburrá -AMVA-, ha identificado la problemática del Río Medellín a partir de la configuración de la cuenca hidrográfica como unidad de manejo. Ello ha propiciado la formulación de líneas estratégicas y de programas encaminados al ordenamiento y manejo integral de distintas cuencas de importancia metropolitana e interregional, con énfasis en el agua, el suelo y la biodiversidad. En este sentido surge el Plan Quebradas, una estrategia ambiental del AMVA para la recuperación integral de 19 microcuencas (afluentes del río Medellín) en los 10 municipios del territorio metropolitano.
En el Municipio de Barbosa, el Plan Quebradas ha priorizado la microcuenca La López, de vital importancia para el sistema de abastecimiento del acueducto municipal de Barbosa.
El proyecto Guardabosques La Quintero de EPM en convenio con el CTA, reconoce la importancia de la microcuenca La López y la Reserva Natural La Quintero para el abastecimiento de agua potable en el municipio de Barbosa. Por esta razón se promueve, la apropiación del territorio a través de un programa forestal comunitario y formación de guardabosques para garantizar el mantenimiento y expansión de las coberturas forestales en la zona así como el acompañamiento en las iniciativas de educación ambiental de la comunidad.
